viernes, 1 de marzo de 2013

Dama de día

No importaba su silencio
Sus palabras, acalladas
Sus ojos opacos
Ni su expresión casi inanimada
Nada.

Un sentimiento estruja por dentro
Deshace, cual ácido, su alma
La corta en mil pedazos
Hace de su felicidad un perverso recuerdo
Dolor.

La vida sigue, le dicen
No sabe por qué
Si pasó algo, ¿qué pasó?
Ya ni el tiempo sabe responder
Olvido.

Voltea al pasado
Sigue igual de sucio y deshonroso
Toma sus ropas elegantes
Se viste de dama
Mentira.